El Papa Francisco, en este mes de abril, nos ha regalado una carta, una Exhortación Apostólica titulada "Gaudete et exsultate" sobre el llamado a la santidad en el mundo actual. El Papa Francisco nos habla de una santidad para ti y para mí, para todos...
Como dice San Pablo: "NOS ELIGIÓ PARA SER SANTOS E IRREPROCHABLES ANTE EL POR EL AMOR".
Como dice San Pablo: "NOS ELIGIÓ PARA SER SANTOS E IRREPROCHABLES ANTE EL POR EL AMOR".
Se trata, ante todo, de sentir que somos de Dios, saber que a El pertenecemos y, por ello, hemos de hacerlo todo "en el nombre de Jesús", siendo contemplativos en la acción, porque vivir desde Dios te lleva a salir del propio yo y a entregarte a los demás. El encuentro con Dios siempre nos lleva a la misión.
Esta carta es una llamada a salir de la "modorra, acedia y adormecimiento en la rutina", a vencer al demonio y sus asechanzas, que nos impiden la cercanía a Dios y a los hermanos. Se trata de una santidad que no consiste en perfeccionismo, porque como nos dice el Papa Francisco, los santos no fueron perfectos en todo lo que hicieron... No hemos de ser funcionarios, sino MISIONEROS APASIONADOS.
No dejes de leer esta carta, porque en ella el Papa habla de santos comunes: ¿Eres consagrado/a? Vive con alegría tu entrega. ¿Estás casado/a? Ocúpate de tu marido o esposa. ¿Eres trabajador? Sé honesto.
En palabras de Van Thuan, en su libro "Cinco panes y dos peces", se trata de "VIVIR EL MOMENTO PRESENTE, COLMÁNDOLO DE AMOR" (cfr. Gaudete et exsultate, nº 17). Acerquémonos cada día a Jesús en la oración y dejémonos transformar por El.
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